Autoridades sospechan que joven falleció cuando intentaba escapar del incendio ocurrido en Centro Juvenil de Alfonso Ugarte

Los hechos desafortunados tuvieron lugar el pasado domingo a las 21:04 horas, cuando un grupo de internos del programa 1, al enterarse de su traslado al penal de Socabaya, desencadenaron un incendio al prender una frazada. La rápida propagación del fuego generó densas columnas de humo en las áreas del programa 2, donde lamentablemente se encontró el cuerpo de Bryan Quispe.

Según testimonios recogidos por autoridades, tras el inicio del incendio, el responsable del centro juvenil abrió las rejas y puertas del programa 1, pero olvidó desbloquear las puertas del programa 2, dejando a varios jóvenes atrapados. Las imágenes de una cámara de seguridad capturaron el momento en que los internos forzaron las puertas, ingresaron al baño, siendo este el último registro antes de que el humo cubriera todo el entorno.

En un intento desesperado por escapar de las llamas y buscar aire a través de una ventana enrejada, Bryan Quispe habría subido al tanque del inodoro. Lamentablemente, en su intento por alcanzar la rejilla, cayó golpeándose la cabeza contra el sumidero del baño. La autopsia determinó que su fallecimiento fue a causa de la inhalación de monóxido de carbono, descartando así inicialmente una posible acción criminal relacionada con el golpe.

Entre lágrimas y con un llamado desgarrador, Lucrecia Sanca, madre de Bryan Quispe, clama por justicia y rechaza la idea de que la tragedia sea catalogada como un accidente. «Me lo han arrebatado de manera injusta. Justicia para mi hijo. Estaba a punto de recuperar su libertad», expresó la afligida madre.

Los restos de Bryan fueron trasladados al centro poblado de Cancharani (Puno), donde autoridades de la División de Homicidios y el director ejecutivo de PRONACEJ, Francisco Nivardo, se encuentran revisando las grabaciones de seguridad para esclarecer los detalles que desencadenaron el fatídico suceso.